Identidad

LEGADO GENERACIONAL

Las salinas de manantial de evaporación solar de Salinas Don Diego, situadas en los parajes naturales de Andalucía Oriental, en la capital de Jaén, son lugares donde se obtiene sal de manantial virgen a partir de salmuera extraída de manantiales subterráneos, por la acción combinada del viento y del sol, un método productivo conocido al menos desde época romana, que Salinas Don Diego ha sabido mantener y respectar dando lugar a una producción de sal de manantial virgen única en el mundo. Las salinas de manantial de Salinas Don Diego son las únicas salinas Íberas que se han conservado gracias a la tradición generacional salinera que ha ido pasando de padres a hijos y que se ha mantenido inalterable en su sistema de producción totalmente artesanal, sostenible, ecológico y respetuoso con el medio ambiente. Las Salinas Don Diego se han mantenido durante generaciones por la gestión sostenible y el saber hacer de sus maestros salineros, manteniendo el patrimonio intangible de las salinas de interior además del conjunto de tradiciones, creencias y métodos de trabajo ancestrales íbero- romanas.

LA FAMILIA

El saber hacer de “Salinas Don Diego” comienza hace más de 200 años de antigüedad a manos de D. Diego López y su esposa, la cual provenía de familia de maestros salineros, dedicado a la explotación de sal de manantial, en las salinas situadas en la provincia de Jaén, en el término de Jimena. Durante toda su vida D. Diego se dedica a la elaboración y venta de sal de manantial, dejando su legado a su hijo D. Cristóbal López Ángulo, actividad que deja de lado como principal para dedicarse al tratado de ganado a nivel nacional, sin dejar abandonada su actividad de venta de sal. Antes de la jubilación del mismo, su hijo, D. Diego López Jiménez, nieto del primer citado D. Diego López, le atrae de nuevo la actividad de elaboración de sal de manantial, llegando a arrendar varias salinas de la provincia de Jaén que se encontraban en actividad y vendiendo la misma al mercado local- provincial, hasta que se decide por la compraventa de dos salinas de la provincia de Jaén, que es de donde se extrae la citada sal de manantial actual, ambas salinas son adquiridas en propiedad en 1990 y en 1999 por Don Diego López Jiménez a sabiendas del abandono de éstas por sus respectivos propietarios, llevando consigo, en su adquisición el saber hacer se sus progenitores en esta actividad, respetando su legado, D. Diego López Jiménez y Dña. Úrsula Pérez Bolaños, matrimonio, fundan “ Sales López”, en 1970, y siguen la tradición familiar de sus progenitores, maestros salineros, hasta que en 2012 fallece D. Diego López Jiménez y se renombra en 2013 la empresa como “Salinas Don Diego” en honor a sus fundadores y maestros, su esposa D. Úrsula Pérez Bolaños y sus cinco hijos siguen en la actualidad con la actividad respetando el legado tradicional familiar llevando consigo las enseñanzas de su padre, el gran maestro salinero D. Diego López Jiménez, consiguiendo así una sal de manantial única en el continente Europeo, extraída de forma artesanal y sostenible, sin proceso químico alguno en su elaboración.